por Wiliam Ajanel
No es un post sobre política ni mucho menos [aunque el título se preste a miles de interpretaciones], sencillamente me gustaría, que sin convertirnos en fanáticos activistas, respetaramos a aquellos que también forman parte de este mundo. Aquellos que sin elegir familias resultan viviendo con completos desconocidos que después de un tiempo reconocen como parte de su hogar, y que el día menos pensado se van sin decir palabras y reclamar un sólo maltrato.
Un león, una foca y una mascota no tendrían por qué ser tan distintos, ¿O vamos a respetar sólo a aquellos que nos causan temor por su naturaleza salvaje? ¿Nos vamos a armar contra aquellos que colgados sobre una tabla en la sala se verían como un trofeo o un triunfo de nuestra superioridad intelectual? Hay que ser menos cobardes y más humanos, aprender que un golpe o un maltrato no es una señal de superioridad.
Aún no entiendo que mal día nos adueñamos de todo el mundo y colocamos nuestros pequeños imperios sobre aquellos lugares donde los animales han habitado siempre, por suerte ellos no pueden leer esos famosos rótulos donde se prohibe el ingreso de animales, cuan lejos están de desarrollar sentimientos de indignación como nosotros, la raza superior.
Sin necesidad de abandonar la civilización, sin necesidad de apartar nuestras necesidades, se puede vivir en paz y armonía con el resto de la naturaleza, sin necesidad de convertirse en mártires que golpean su pecho cada vez que ven una injusticia. Es posible mejorar el mundo en el que vivimos, comenzando a ser cordiales con aquellos que no pueden demostrar unos buenos modales, sencillamente porque no entienden de etiqueta, nunca entraron a un aula y ni siquiera aprendieron a leer, pero que siguen siendo tan parte de este mundo como cualquiera de nosotros.
A los animales, un respeto por favor. Sin caer en falsos romanticismos y acabar convirtiéndonos en protectores de los que no necesitan más que un respeto, ni llegar a convertirnos en necios intrusos que en lugar de mejorar las condiciones, las contaminamos con nuestras asombrosas ideas.
A los animales, un respeto por favor, no pido que se los haga parte de nuestra rutina y civilización [como ocurre con muchas mascotas], tampoco que aprendan a convivir entre changarros tecnológicos ni mucho menos un "plan", dejarlos ser a su manera y a su espontáneo instinto. Cuidar de aquellos que a bien hemos decidido mantener a nuestro lado, y respetar a aquellos que sin hogar y destino vagan buscando sobrevivir, del mundo, de la civilización, de sus propias carencias.
Ellos no serán mejor que nosotros, ni tampoco son lo peor, por lo mismo un respeto es lo mínimo que se puede pedir, por aquellos que en el diario vivir alegran nuestros hogares con sus peculiares gracias y esos otros que desconocen el significado de un letrero en la calle y en las carreteras. Me sobrarían los enlaces y los casos de maltrato, la cantidad de comentarios y sucesos desafortunados, sencillamente pido a los animales, un respeto por favor.
Por último, en algún momento de nuestras vidas nació la mala costumbre de llamarnos a nosotros mismos con los nombres de algunos animales en señal de ofensa y desaprobación, que lejos de la realidad y que tristes comentarios, porque siendo ellos inferiores logran superar las mismas y muchas más penas que nosotros con sus pocos o nulos recursos, ellos no compran, no trabajan, no luchan... sobreviven.
Un saludo
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mis respetos thombjork...
ResponderEliminar:roll:
tus palabras hace eco y conciencia en mi, gracias
ResponderEliminarHola amigo/a te invito a www.igualdadanimal.org.
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