miércoles, 10 de diciembre de 2008


¿Celebrar o no celebrar? es la cuestión...

por Wiliam Ajanel


La navidad es sin duda una de las mayores festividades del año. No entraré en detalle sobre su concepción, me limitaré a mencionar en este caso lo que nos dice la Wikipedia al respecto: La Navidad (latín: nativitas, 'nacimiento' )? es una de las fiestas más importantes del Cristianismo, junto con la Pascua y Pentecostés, que celebra el nacimiento de Jesucristo en Belén [...]

Lo que viene siendo una festividad religiosa a nivel mundial. Todos sabemos también que existen diversas posturas al respecto, y una de las que sobresale es el consumismo desenfrenado que se manifiesta en estas fechas, producto de la mercadotencia, la publicidad, etc.

Ahora bien, sin entrar en detalle sobre la valoración ética de tales prácticas, existen ciertas posturas que en lo personal me resultan un tanto hipócritas, como por ejemplo:

Recurrir al correctismo político y desear felices fiestas para no herir sensibilidades...

Esto en cierto modo lo que genera es una confusión sobre el sentido de celebrar tales o cuales fechas, en el caso del año nuevo no existe tendencia religiosa alguna por la cual preocuparse. Sin embargo, existen cientos de personas que aunque no creen en la Navidad, amontonan regalos debajo de un árbol alimentando fábulas de un hombre gordo y de barba blanca que llega en un trineo. Sin hacer apología de ninguna de las dos, bajo una lógica muy básica diríamos que ni la navidad de Santa Claus ni la de Jesús tienen mucho sentido que digamos.

Es imposible huir de la navidad, y estoy cansado de estos fanáticos religiosos y consumistas...

Conozco varias personas que son capaces de hacerlo, pueden vivir un día completamente normal sin atacar a nadie ni juzgar a sus semejantes por tales motivos. Incluso hay quienes aprovechan para salir a algún lugar alejado de la bulla [dicho sea de paso para quienes gozan de descanso] y compartir a su modo con la familia, etc. No hace falta hacer un escándalo si no se está conforme, simplemente la indiferencia será una herramienta muy útil en caso de no querer celebrarla.

Di no al maldito consumismo navideño, acabemos con esta farsa...

¿Por qué en este momento? ¿Acaso el consumismo no es de diario? Bajo la lógica de una economía de mercado sabemos que mientras más producimos, más vendemos, y en cierto modo más nos forramos de billetes. La gente tiene pleno derecho de gastar su dinero como bien le parezca. Por otro lado estoy casi seguro que la gente es consciente de que regalar cosas, es simplemente un truco más de miles de empresas que aprovechan estas fechas para vender, y aún así la gente quiere hacerlo y lo hace. También están en su derecho al final.

Estas posturas al final son también el reflejo de una inconformidad social y un desprecio hacia la manera en que se deshumaniza al individuo. Lo correcto en todo caso es permanecer fieles a nuestros principios, cuales quiera que estos sean y convivir con el resto de los mortales en un ambiente de paz. Ese es el sentido de vivir en sociedad, respetarnos en todos los aspectos y no solamente los que nos convienen, y cuando sea momento de tolerar hacerlo. Si buscamos el respeto hacia nuestras creencias, es justo también que respetemos las de la mayoría de nuestros semejantes.

Por último, la Navidad es tal cual es. Indiferentemente de nuestras creencias se aprovecha la época para compartir con familia y amigos.

¿Celebrar o no celebrar? es la cuestión... Pero si somos inteligentes, estoy seguro que no tendremos problemas en encontrar solución.


Saludos


Referencias:

Definición de Navidad por Wikipedia, en el artículo Navidad